No pudo ser. Se nos fué la Madrugá, por primera vez en nuestras vidas, sin que nuestra Rosa perfumara las calles. Quiso el agua impedir nuestro momento de gozo. Eran las cinco, la hora mágica y no dejaba de llover. La junta de Gobierno tomó la mejor de las decisiones posibles y así quedó cerrada para nosotros nuestra noche. No podiamos ni articular palabra, pareciamos mudos en el desayuno, esto no podía estar pasando. Pero así fue. Un momento histórico, pero triste. Nadie recuerda que la cofradía no hubiese salido por el mal tiempo. Pero nos tocó vivirlo por primera vez. Mis gracias a la gente de abajo por su comportamiento sereno en esa aciaga noche y por sus ánimos.
Ya pensamos en el año que viene. Hay quien está ya poniendo las fechas de los ensayos. Nos queda menos.
De todas formas, recordad que Ella siempre nos espera cada día del año, en su altar. Con una simple visita a sus plantas, se olvidan los sinsabores.
1 comentario:
Se perfectamente lo que se siente. El Viernes Santo me ocurrió lo mismo en El Cachorro, no pudo ser, pero Él lo decidió así, y siempre estará ahí para esperarnos. Enhorabuena por el blog, lo acabo de conocer y me he registrado como seguidor. Un fuerte abrazo desde la Tertulia Cofrade Cruz Arbórea.
http://tertuliacofradecruzarborea.blogspot.com/
Publicar un comentario